El llamado a ser un buen prójimo
- ecosdelprogreso
- 21 jun 2020
- 1 Min. de lectura
Para sacarle el máximo provecho a este devocional, lea los pasajes a los que se hacen referencia.
Cuando algún ser querido sufre, tratamos de aligerar sus cargas para aliviar su dolor, atender sus necesidades o reparar una falta. Pero si ayudar a familiares y amigos a veces es complicado, ayudar a extraños puede serlo aún más. Sin embargo, la parábola del buen samaritano nos reta a hacerlo (Lc 10.25-37).
Situándonos en la historia, es posible que la mayoría de nosotros no se hubiera detenido, incluso en un camino más seguro que la ruta que iba de Jerusalén a Jericó. No obstante, vemos que el samaritano arriesga su seguridad para responder a la necesidad de alguien que no conocía. Del mismo modo, a cada uno de nosotros se le presentan oportunidades de demostrar la misericordia de Dios; pero solo nos daremos cuenta de ellas si ponemos nuestros ojos en la otra persona y no en nosotros.
PIENSE EN ESTO
A menudo ignoramos las necesidades de los demás porque creemos que otra persona ayudará. Los psicólogos sociales llaman a este fenómeno difusión de la responsabilidad. ¿Qué podemos hacer para extender misericordia?
¿Conoce a alguien que demuestra misericordia en su vida cotidiana? ¿Qué puede aprender de su ejemplo?
Biblia en un año: Salmo 55-59
Comments